Revisando tristes recuerdos, una confrontación con “Positives” de Zbigniew Libera
- Annemarie Bas
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Zbigniew Libera (Pabianice, 1959) es un artista polaco que no tiene miedo a forzar los límites, creando una obra provocativa que desafía los relatos canónicos de nuestra cultura contemporánea. Es conocido internacionalmente por su trabajo LEGO (1996), una edición limitada de tres juegos de LEGO de un campo de concentración, que provocó una controversia en los medios de comunicación durante la Bienal de Venecia de 1997. El curador del pabellón polaco, Jan Stanisław Wojciechowski, se negó a presentarla, afirmando que la obra trataba uno de los momentos más oscuros de la civilización europea de una manera demasiado frívola.1
LEGO. Zbigniew Libera, 1996.
En 2002-2003 Libera hizo la serie Positives. Lo describió como "otro intento de jugar con trauma”2. Para esta serie, seleccionó fotografías icónicas y traumáticas de la historia reciente e hizo una versión optimista de ellas. La foto de la niña vietnamita desnuda corriendo del pueblo de Trang Bang después del bombardeo de napalm en 1972, ha sido transformada en la imagen positiva de una mujer desnuda y sonriente; un grupo de prisioneros de un campo de concentración, es reemplazada por figuras sonrientes en trajes rayados.3
Positives. Zbigniew Libera, 2002-2003.
A primera vista se puede pensar que esta serie, como LEGO, tiene un acercamiento demasiado frívolo de episodios traumáticos de nuestra historia reciente. Algunas de las personas que vivieron estos horribles momentos todavía están vivos. ¿No es una falta de respeto confrontarlos con una reinterpretación optimista de su sufrimiento? ¿Y con qué fin? ¿Qué quiere decir Libera con este trabajo? ¿Solamente quiere ser polémico o hay algún razonamiento más profundo detrás de esto?
En una entrevista con Katarzyna Bielas y Dorota Jarecka, del periódico polaco Gazeta Wyborcza, Libera dijó:
Me parece que hoy en día no queremos saber cómo es la realidad, queremos experimentarla positivamente. Es por eso que los prisioneros se convirtieron en habitantes, ellos estaban tristes, estos están alegres. Por otro lado, esto puede ser el mecanismo de la propaganda nazi o soviética, que cambió la realidad por un conjunto de lemas optimistas.4
Por un lado, es cierto que el mercado nos da una avalancha de imágenes glamurosas y positivas. Si bien hay muchos asuntos graves que solicitan nuestra atención—como el cambio climático, conflictos armados, desigualdad— es muy fácil perderse entre las últimas noticias sobre personas famosas y las tendencias de la moda.5 Sin embargo, lo contrario puede ser aún más cierto. Cada día nos vemos sumergidos por una cascada de imágenes impactantes, tristes y negativas, de personas decapitadas por terroristas y refugiados que huyen de zonas en conflicto. Basta pensar en la imagen de Aylan, el pequeño niño sirio que se ahogó en un intento de alcanzar las costas de Europa. Esta imagen estuvo en las noticias por días y fue ampliamente difundida por los redes sociales. En este caso, la llamada dura realidad no fue ignorada o encubierta por lemas optimistas, más bien fue magnificada y utilizada como un recurso moral y una herramienta para la acción política.
Niño Aylan Kurdi, 2015.
En una entrevista con Hedvig Turai de Art Margins, Libera dio una explicación diferente y más interesante de Positives:
Tienes todas esas fotos traumáticas que, estoy seguro, nadie es capaz de consumir y digerir. No se puede vivir con ellas (…). Creo que la gente, instintivamente no quiere ver estas imágenes, como la de la niña vietnamita herida por el napalm. Tenemos varios bloqueos. Y la foto está bloqueada.6
Por medio de la confrontación con la versión positiva de las fotos traumáticas, Libera espera desbloquear el original, la foto negativa, para que así podamos sentir su impacto nuevamente.7
Uno puede preguntarse si cada persona experimenta este bloqueo psicológico, pero si consideramos un poco más la idea de cuáles fotografías icónicas están bloqueadas, también se puede decir que existe otro tipo de bloqueo que surge con los años, cuando una foto ha sido utilizada una y otra vez como herramienta educativa y política y se ha convertido en parte de una narrativa fija. Hemos aprendido a mirar e interpretar nuestro pasado a través de estas fotografías icónicas y se ha vuelto difícil verlas por sí mismas, sin pensar en las narrativas que hemos construido alrededor de ellas. En la entrevista citada anteriormente, Libera menciona:
Nunca vemos algo por primera vez, siempre vemos un objeto y regresamos a la imagen que hemos visto de este objeto anteriormente. Siempre damos un paso atrás en nuestra memoria, regresando a la imagen previa. Siempre vemos nuestros recuerdos de las cosas y no las cosas mismas. Es como un viaje permanente en nuestros recuerdos. Intenté precisar este proceso de ver y recordar.8
Lo que Libera quiere decir, es que siempre vemos nuestros recuerdos de las cosas y no las cosas mismas, y eso es cierto. En lo personal, cuando veo las fotografías originales en las cuales se basa la imagen positiva de Residents, de inmediato recuerdo toda la educación que he tenido sobre el Holocausto: todas las películas y libros que he visto y leído sobre este tema, así como las conmemoraciones anuales por los horrores de la Segunda Guerra Mundial; y no puedo ver estas imágenes sin pensar en lo que me enseñaron: "No podemos dejar que esto vuelva a suceder jamás". Aunque no hay nada de malo en esa lección, te hace pensar en la fuerza de imágenes icónicas; un poco más de reflexión sobre esto no estaría mal.
Residents. Zbigniew Libera.
Volviendo a la pregunta de si la obra Positives provoca algo más que solamente una polémica, creo la podemos contestar razonablemente en afirmativo, aunque su método no sea el más sensible. El fotógrafo checo Pavel Maria Smejkal, que hace un juego similar de ver y recordar con su serie Fatescapes (2009-2010), tiene un enfoque más sutil: también selecciona imágenes icónicas (de la guerra), pero en lugar de hacer su contraparte positiva, extrae los motivos centrales y las personas.9 Si asumimos que este tipo de imágenes traumáticas están bloqueados, este método sería otra manera de desbloquearlas, aunque sin el shock inicial al ver su reinterpretación positiva.
Fatescapes. Pavel Maria Smejkal, 2009-2010.
Independientemente de cuál sea la preferencia de uno, la obra de Libera no te deja indiferente. Positives nos desafía a preguntarnos si realmente hemos observado las fotos icónicas que nos rodean y si hemos reflexionado sobre los relatos conectados a ellas. El diálogo que esta serie puede inspirar sobre las narrativas fijas que están relacionadas a estas imágenes es valioso y es un diálogo que deberíamos tener más a menudo.
1. http://articles.latimes.com/1997-05-19/news/mn-60350_1_lego-toys
2. http://raster.art.pl/gallery/artists/libera/prace.htm
3. http://www.artmargins.com/index.php/archive/166-the-artist-does-not-own-his-interpretations-hedvig-turai-in-conversation-with-zbigniew-libera
4. http://maurycy.atlas.com.pl/ang.nsf/0/46CD099B0570C5CBC1256E37004D54D4?OpenDocument
5. Un comentario interesante sobre este fenómeno es “Simple Living “ de Nadia Plesner: http://www.nadiaplesner.com/simple-living--darfurnica1
6. http://www.artmargins.com/index.php/archive/166-the-artist-does-not-own-his-interpretations-hedvig-turai-in-conversation-with-zbigniew-libera
7. http://deruimtemaker.nl/2013/02/27/spelen-met-iconen-uit-de-fotografie/
8. http://www.artmargins.com/index.php/archive/166-the-artist-does-not-own-his-interpretations-hedvig-turai-in-conversation-with-zbigniew-libera
9. http://www.pavelmaria.com/fatescapestext2.html